Y es eso, extrañas a la persona en la que no deberías de estar pensando, en la persona que te llenó de daños y dolor, en la persona que confiaste y te traicionó...pero es de admitir que es casi imposible renunciar a aquello en lo que no dejas de pensar todos los días.
Y estás en esa situación en la que por un lado quieres olvidar a esa persona pero por otro sabes que es la única persona en todo el universo que te podría hacer feliz....pero chica joven...mira al frente y muestra al mundo que sola sigues siendo más fuerte que los daños, que las palabras, que el pasado...aprende a no confiarte con palabras, sino con hechos; recuerda: las palabras se las lleva el viento. Acepta que solo porque te digan algo, no significa que sea verdad y aprende a extrañar un poquito menos cada día... No hace falta decir ese "adiós" que tanto duele, porque lo difícil no es eso, lo difícil es aprender a no volver...así que sonríe porque mereces más, no te conformes con menos.
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